Buenos días:
Recientemente vi por televisión al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una
alocución. Hasta aquí, nada extraño. Sin embargo, me llamaron la atención dos
cosas: el eslogan y el logotipo que aparecían detrás de él. El eslogan, “España
Puede.”, y, el logotipo, lo que en un primer momento me parecieron dos banderas
de España superpuestas, una constitucional y otra republicana. Cierto es que,
fijándome mejor, me di cuenta de que no aparecía el color morado de la bandera
republicana sino una franja azul. Este logotipo consta de cuatro estrechos
rectángulos: rojo, amarillo, rojo y azul.
Los
oyentes más avispados recordarán que el pasado 31 de agosto Pedro Sánchez
realizó una conferencia en la Casa de América de Madrid con el título de
“España puede. Recuperación, Transformación, Resiliencia”, en la que ya se
vieron el lema y el logo mencionados.
Los
medios de comunicación no han hecho prácticamente mención a estos detalles
subliminales. Así que, navegando por internet, he encontrado defensores y
detractores de esta cuestión. Por ejemplo, me he enterado de que un diputado de
Vox había denunciado este juego de colores, aunque con otra teoría al respecto.
También he podido leer cómo algún diario digital tildaba de “conspiranoico” a este político mientras
que, otros, lo avalaban. La verdad es que a
mí me da igual lo que piense uno, otro, Maroto o el de la moto, tan
legítimo es defender una monarquía parlamentaria como una república. Pero lo
que sí me molesta es esa ambigüedad que la mayor parte de partidos políticos
utiliza, sobre todo PSOE y PP, y esos mensajes subliminales que algunas
formaciones políticas envían reiteradamente a los ciudadanos, como en este caso
hace el Partido Socialista.
Gustarán más o gustarán menos partidos como Podemos y Vox, pero de lo que
no puede acusárseles es de no decir las cosas claras. Luego sus representantes
actuarán coherentemente o no, y donde
dijeron digo, dicen Diego, o no. Pero en sus programas electorales expresan
sus ideas de forma muy clarita, al contrario que los dos grandes partidos
nacionales. PSOE y PP intentan siempre camuflar los temas polémicos en sus
programas electorales, sobre todo los populares, quienes tienen un miedo atroz
a pisar callos.
Si nos
volvemos a centrar en el tema de los pabellones, lo cierto es que a través de
las pantallas de televisión, la franja azul parece morada y, a pesar de que
encima tiene una franja roja y no amarilla, lleva a confusión. He tenido que
entrar en la web del Partido Socialista para darme cuenta de que en la parte
izquierda del rectángulo azulón aparecen las estrellas de la Unión Europea
(UE), es decir, que esa franja simula la bandera de la UE.
Otra
cuestión es la del eslogan, que más bien parece un guiño a Podemos. Sin duda, “España
Puede.”, que es el lema escogido por el Gobierno para lanzar su Plan de
Recuperación, Transformación y Resiliencia, recuerda más a la formación de
Pablo Iglesias que a un proyecto gubernamental.
Desde la capital del Somontano, ¡Feliz semana!
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