lunes, 21 de abril de 2014

Pinceladas Templarias (14), por Jesús Martínez

Templarios

"¿De dónde sacaron las ingentes riquezas acumuladas?

Fue cuestión de tiempo, aunque poco, teniendo en cuenta que el poder de la Orden del Temple duró escasamente 200 años.

1- Probablemente, siguiendo el ejemplo del Conde de Champagne, Hugo Rigau (si recordamos, se convirtió en el noveno fundador, poniéndose a las órdenes de quien había sido su vasallo, donando al Temple todas sus riquezas y posesiones), a través de donaciones. Llegó un momento en el que las más preclaras familias francesas quisieron tener un hijo, un hermano u otro familiar que fuese templario. Para ello donaban ingentes sumas de dinero como dote. Fue un hecho que se puso de moda.

2- Merece la pena recordar los viajes que, según algunos cronistas, realizaban a Sudamérica en busca de plata, partiendo del puerto de La Rochelle.

3- Su valentía hizo que los reyes, nobles y prohombres ricos les diesen en custodia sus riquezas.

4- En ese instante “inventaron el cheque de viaje, la hipoteca y el pagaré”. Me explico:
Cuando uno de estos personajes necesitaba dinero, no le entregaban dinero ni joyas. Le daban “dinero templario” por medio de un documento propio del momento. Pero las riquezas permanecían en las arcas de la Orden.

código alfabeto templario
Si cualquiera de ellos marchaba a las cruzadas y necesitaba dinero para pagar sus huestes, le extendían un “cheque de viaje”, un documento en el que figuraba la cantidad solicitada.

En cualquiera de las innumerables casas de la Orden le entregaban una cantidad descontando la suma entregada del documento. Al mismo tiempo hipotecaban sus posesiones. Así, si cualquiera de ellos perecía en el combate o en el camino, todo pasaba a los templarios.

Los documentos secretos estaban escritos en un alfabeto secreto, valga la redundancia, formado por la “Cruz Ochavada”.

(Observación 1: Aunque en algunas partes aparecen varias letras, unas corresponden al ángulo superior, otras al ángulo central y otras al ángulo interior, bien sea interno o externo).

alfabeto templario
(Observación 2: Hay que tener también en cuenta que los números, en aquella época, podrían ser romanos:
I, II, III, IIII o acaso IV, V, VI, VII, VIII, VIIII o acaso IX, 0 (valor este último aprendido seguramente de los judíos, porque era desconocido en Occidente. Sin embargo, lo conocían los mayas. También conocían el sistema binario que se usa para la programación de nuestros ordenadores).

Además, cada encomienda y cada maestrazgo tenían su propio alfabeto, todos diferentes. Pasado algún tiempo, no tenían más que dar un cuarto de vuelta a la cruz para que las letras cambiasen.

Las cuestiones comerciales y extensión de documentos mercantiles, aunque parezca un invento de los templarios, seguramente lo aprendieron de sus “amigos” los judíos. Ya escribimos que donde había juderías, cerca estaba el palacio o casa de los templarios. Precisamente esa amistad les valió la acusación de “confraternidad con los infieles”, cuando fueron exterminados y la Orden disuelta.

Autor: Jesús Martínez


Pinceladas Templarias (1), por Jesús Martínez

4 comentarios:

  1. Hola Héctor,
    de todos los artículos de "Pinceladas Templarias" este es para mí el más sorprendente. Podríamos decir que estos "cheques de viaje" son antecesores de lo que aconteció justo después en lo que las transacciones monetarias se refiere. En Roma, Venecia, Génova, en las ferias de la Francia medieval... utilizaron letras de cambio. También en Venecia apareció el primer banco privado durante el siglo XII promulgándose siglos después leyes sobre el ejercicio de la banca. Pero desconocía lo que nos explicas. ¡Magnífico! Muy aleccionadores estos artículos.
    Un abrazo a los dos (Héctor y Jesús)

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    1. Hola, Francisco:
      La verdad es que la Historia, en general, siempre nos depara sorpresas. El tema de los Templarios es fascinante y, sin duda, siempre aparecen nuevos datos asombrosos. Jesús Martínez ha tratado muy a fondo la temática templaria.
      Un abrazo.

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  2. Como bien dice Francisco Javier, son artículos muy aleccionadores. Me encanta la forma en que Jesús Martínez nos envía los mismos, dosis pequeñas pero muy cargadas de conocimiento. Como siempre enhorabuena.

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  3. Gracias por tu comentario, Carlos. Coincido contigo en que estos artículos de Jesús son muy didácticos.
    Un saludo.

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